24 de septiembre de 2007

La vida es puro teatro


Viajar con todo programado es perfecto cuando no te quieres perder nada... Sin embargo, nada puede igualar al placer del viaje impulsivo, inesperado y visceral... En principio nada hacía suponer que en nuestro recorrido Siciliano hubiese imprevistos ni lugares fuera de la ruta que ya habíamos trazado, recorriendo fundamentalmente el oeste de la isla. Quedaba para otra ocasión el oriente y sus ciudades monumentales, el impecable paisajismo de Taormina o la decadencia del mosaico arquitectónico de Siracusa.

Sin embargo, uno de mis sueños fue siempre viajar hasta la ciudad de Noto. No sabría decir muy bien por qué. Algunas de las cosas que había leído sobre Sicilia tuvieron (curiosamente) que ver con esta ciudad. Y siempre he querido imaginarme en el escenario de esa Noto (de la que por otra parte tampoco tenía muchos referentes visuales) el lugar perfecto donde desarrollar esa especial capacidad siciliana para el drama.

Así, en una mañana calurosísima de Julio, rozando los cuarenta grados junto al mar y comprobando que la visita del Valle de los Templos de Agrigento había terminado relativamente pronto (pues debido al calor la habíamos comenzado tempranísimo), nos vimos en la tesitura de elegir entre una sobremesa de playa y chiringuito, o una idea que de repente se nos cruzó por la cabeza: Hacer un esfuerzo kilométrico e ir hasta Noto, una de las ciudades que más pena me daba no visitar en nuestro viaje. No lo pensamos mucho, la verdad. Y ni las dificultades de la carretera, ni los imprevistos (un incendio del que salimos "pitando" y a la siciliana, un rebaño de cabras cortando el camino, una autovía inexistente pero diseñada sobre nuestro plano, etc) ni la previsión de calor asfixiante, ni el denso tráfico nos hicieron retroceder. A cada kilómetro, a cada dificultad, nuestras ansias de llegar a la ciudad aumentaban como una espuma imparable.
Al fin, a media tarde, llegábamos a una de las más bellas ciudades del Barroco Siciliano.

Como muchas de las ciudades del oriente de la isla, gran parte de la arquitectura de Noto también nace de la destrucción del gran terremoto de 1693. Pero si bien en lugares como Catania o Ragusa, la reconstrucción dio lugar a hermosísimos y notables ejemplos de un excelente barroco, en Noto, el terremoto dio lugar a una ciudad completamente nueva.
Esto es importante a la hora de enfrentarse a esta ciudad. Saber que existe una Noto Antica, que quedó arrasada por el seísmo, y que fue abandonada poco a poco, a pesar de la resistencia de sus habitantes para trasladarse a una nueva y moderna ciudad del siglo XVIII, creada de la nada en la terraza de una colina, pero a nada menos que 12 kilómetros del emplazamiento original, y diseñada bajo las pretensiones oníricas de los gobernadores borbónicos que pretendieron crear algo quizá grande, excelso, exuberante... Me temo que lo consiguieron.

Los arquitectos Rosario Gagliardi y Vincenzo Sinatra construyeron una ciudad al gusto de la época y del carácter de sus habitantes, a lo largo de un eje principal y tres plazas que alternan conventos, palacios, iglesias y monasterios. La ciudad finalmente es como un gran escenario teatral donde desarrollar el drama de la vida.
El equilibrio del conjunto es asombroso, no sólo porque está diseñado como un todo donde la calle y su desarrollo son los elementos arquitectónicos principales y no los límites del mismo, sino porque estos artistas siguieron en sus diseños un arcaísmo que ligaba sus edificios más con el siglo XVII que con el rococó XVIII, lo cual los dotó de una contención expresiva que consigue transformar el con frecuencia recargado barroco en un más allá del renacimiento en el que cada pequeño rincón, cada espacio, alcanza cotas de clasicismo de una belleza y una armonía impecables.


Llegamos a la ciudad con más de cuarenta grados a la sombra, pero eso no importaba. Su belleza limpia y serena brillaba aún más con el sol de la tarde, ya que los edificios están construidos de una piedra naranja que se deja mimar por esa luz tan especial. Por contraste, el exceso corresponde a los palacios en los bajos de sus balcones, donde los artistas recrearon de manera incisiva y exuberante, todo un universo de submundos fantásticos que nos observan desde las alturas.



Noto es la horma del "zapato" siciliano, el escenario perfecto en el que uno imagina dramas humanos, exageradas pasiones, dramáticos avatares. Un escenario que va un paso más allá de aquella representación de ciudad ideal que Scamozzi ideó para el maravilloso Teatro Olímpico de Vicenza. Un paso más allá que convierte en real y tangible lo ideal. Cuando uno llega al Teatro Olimpico desearía penetrar por el escenario y sentirse dentro de esa ciudad de perspectiva ideal, pero lamentablemente aquello no es más que una ilusión, un escenario, un trompe d'oeil, un reflejo de teatro dentro del teatro.
Pero cuando estamos en Noto es como si uno atravesase un espejo y nos encontrásemos que al otro lado de repente estuviese la ciudad ideal, y la perspectiva se transformase en algo tangible, un lugar donde pasamos a ser protagonistas de la escena.
La magia del teatro quizá esté en ser representación, símbolo, non-dit. Y Noto es, sin embargo, no un sustituto del teatro, sino la misma teatralización de la vida dentro de un escenario envolvente y teatral como pocos en el mundo. Una Atlántida creada en vez de destruida: al contrario, surgida de la tierra y de la destrucción misma de la Naturaleza para servir de molde a una forma de vida marcada por la intensidad de la emoción, el gesto exagerado y una existencia grandilocuente incluso en este minúsculo rincón de una isla dentro de un mar lleno de voces e historias milenarias.



La emoción me latía en cara mirada, en cada calle que subí, en cada plaza en la que me sentí en un escenario, casi vomitando las historias que me recorren, dejando que adoptasen el fondo perfecto de los espacios barrocos de Noto... Allí se quedaron, de alguna forma, bañadas en una luz que me tranquiliza recordar. Sí, tranquilo me quedé, sosegado, con ese efecto como de droga del final de las tardes de calor, sobre las aceras hirvientes de Noto, anonadado ante la elegancia incomprensible de una forma de vida con la que no me identifico (¿o sí?), pero que supongo que tiene mucho más de lo atávico que hay en mí de lo que puedo entender.
Sí, me quedé confuso y embriagado. De belleza y palabras, de luz y de espacio, de drama y recuerdos... Y es que la vida, me temo, es puro teatro.

21 comentarios:

Fenjx dijo...

"actores unas veces
espectadores siempre
sencillamente y sin saber
la vida quita y da papel"

salva dijo...

NIño como en esa canción

"teatro,
lo tuyo es puro teatro,
falsedad bien ensayada,
estudiado simulacro....".

Tienes toda la razón del mundo, hay ciudades que en sí mismas son un escenario y que tienen el poder de trasladarte al pasado, a un ambiente o a una forma de vida determinada, sólo hace falta estar atento a los pequeños detalles, a la magia y a las historias que se esconden detrás de sus muros.

Me encantan las fotos que pones!.
Un beso!

David dijo...

Una ciudad tan planificada, reconstruida desde cero... ¿no te llega a agobiar? Según te he escuchado, Sicilia es un fluido caos, parece que no encaja en la isla ¿verdad?

Carlitos Sublime dijo...

Joder, qué bonito... y qué interesante eso que cuentas. Yo de Sicilia tengo poca idea, aparte de los templos griegos,el elemento bizantino y algo de las ciudades más conocidas. Sin embargo, por lo que tú comentas y por lo que dicen quienes la conocen, es una Italia diferente.

Algún día la recorreré. Seguro.

Besos, amiguín.

Carlitos

Martini dijo...

Ains, que belleza!!

Mathieu Saladin dijo...

Uy estas fotos me suenan... deben estar colgadas en alguna red clandestina del ciberespacio :P

"La vida es el ensayo de una obra de teatro que nunca llegará a estrenarse"

VIVA ITALIA!!!

Anónimo dijo...

coincido con david, pero me gusta le relfexión que haces.
cómo esta ciudad, tan artificialmente planificada no es más que un reflejo de lo que todos buscamos un poco.

Alfredo dijo...

El ministerio de turismo siciliano debería pagarte la labor. Me entran unas ganas incontenibles de viajar allí. Y anoto Noto.

senses and nonsenses dijo...

una crónica excelsa sobre sicilia, dan muchas ganas de ir a Noto.
estoy TAN de acuerdo, la vida es un teatro, y las ciudades el escenario ideal para representar las obras. puro teatro.

un abrazo.

Anónimo dijo...

Probablemente el "rococó" o "rocaille" nunca encajó bien en Italia, demasiado acostumbrada a un clasicismo secular.Quizá sólo Borromini se acercó un poco aunque no en el detalle decorativo, sino en las fachadas curvas, como la que presentas en la primera foto, por cierto, de aspecto cóncavo y con huecos muy trabajados, combinando varios elementos geométricos. Aun así los elementos fundamentales de la estructura, columnas, pilastras, arquitrabes o frontones no se pierden en una masa ingente de detalles decorativos. Claro qe aquí, en Italia, el barroco no necesitaba tanto asumir su papel proselitista de la fe católica, al contrario que en centroeuropa donde sí se enfrentaba abiertamente a la herejía protestante y luterana y por eso se llega a los excesos, hermosos y hasta apabullantes de la decoración, con ánimo de impresionar y de oponerse a la estética desnuda y fría, muy poco atractiva.En Italia, el barroco se traduce en estudiado urbanismo y en grandiosos espacios como la columnata de Bernini en Roma cuyo propósito es abrazar, con su forma circular/elíptica, a los fieles, o como el trazado de Noto, sucesión de espacios cerrados y alargados, la calle y epacios abiertos y cuadrados o circulares, las plazas.Esto supone también la creación de una serie de diafragmas que permiten más o menos luz, técnica que, por cierto, ya habían utilizado los egipcios.

un-angel dijo...

Una hermosura de imágenes, que luz tan especial. Hace que se me agachen las orejas viendo la mañana gris de ahi fuera...
Un abrazo

NaT dijo...

Siempre que leo tus viajes, me entran unas ganas de salir corriendo y alejarme de aqui... menos mal que en breve me voy fuera, lejos, lejos. Sólo espero disfrutar tanto como tú, llenarme de todas esas cosas bellas que hay en el exterior de mis cuatro paredes y mis cuatro paradas (de bus)y saber luago expresarlo.

Un besote gordo, pasádlo muy bien en el sur

Francisco García dijo...

Una vez más, con tus piedras naranjas me emociono recordando las que yo ví y toqué en su día...
Besos.

Unknown dijo...

tus palabras envuelven como las imágenes que nos dejas... cálidas, sensuales y agradables... igual que cuando uno está a tu lado escuchándote...
besos..

CRISTINA dijo...

Sicilia es una de mis asignaturas pendientes.
Guardo este post como guía turística.

Y nada más divertido que viajar libremente por Italia (Trenitalia a veces brinda escenas del más puro neorrealismo... de aquellas películas maravillosas...) ¿qué pasó con el incendio y las ovejas?

Enriquecedor, interesante, el comentario que un "anónimo" ha hecho hablando del barroco en Italia, nombrando a ¡¡Bernini!!...
Y preciosas las fotos.

Saludos

Cvalda dijo...

Qué post más bonito...qué ganas de visitar Italia, de conocerla de verdad, cada rincón, su gente, su gastronomía, sus obras de arte...

Es un país inmenso, en todo lo amplia que es esta palabra ^^

Unknown dijo...

Y es que hay algo más escenográfico que todo lo relacionado con Italia?¿, parece que cada rincón de su territorio ha sido diseñado para el deleite de los sentidos.

Vulcano Lover dijo...

Ben
la vida es un teatro, tienes razón... peo los italianos son especialmente dramáticos, y los sicilianos aún más...quizá por eso que sus escenarios son tan bellos.
Un beso, desde este lado del mundo

Fenjx
Pues sí, amigo... quizá sea hora de ir repartiendo papeles de nuevo, no?
Besos muy apretados.

Salva.
Pensé en la canción de la lupe precísamente para dar título al post. Sí, en italia esa capacidad de retroceder al pasado (al menos para mí) está a flor de piel.
Muchos besos.

David
Sí, si que encaja... sólo que hay que ir a verlo allí para ver cómo. Los italianos pueden ser caóticos, pero siempre elegantes y clásicos...Noto, aunque pequeño (con el tiempo dejó de ser capital de provincia y cayó en el olvido, lo cual, afortunadamente, la preservó) es más grande que el centro histórico... ya has visto fotos tú de cómo está el resto, jejeje.
Bss

Carlitos.
ja ja ja, por fin me comentas un post... anda que no estás flojo... Y lo que me acuerdo yo de ti cuando viajo a sitios bonitos...
besos.

Mart-ini
Sí, Martini, una belleza que por mucho que escriba sobre ella no la puedo transmitir... hay que ir allí para verla... quizá con un martini en mano...
BMuchos besos.


Huguito
Si es que el rincón del ciberespacio que tú no conozcas... Sí, viva Italia y viva el amor libre, jejeje.
Besos, guapísimo.

Gatchan
Ciudad diseñada, qeu no tanto planificada... Como todo en la vida, cuando llega la hora de ponerla en práctica, sucede lo que sucede..Noto es mucho más habitable de lo que podría suponerse a tenor de mis palabras, la verdad. A ver si te animas y lo compruebas tú.
Bicos.

Alfredo
Jejejeje, no, qué va, del ministerio de turismo italiano no recibo ni un duro. Noto merece mucho la pena, porque la ciudad no ha crecido mucho y se preserva perfectamente. Por eso también es patrimonio de la humanidad por la unesco...vamos, que al final no estoy descubriendo Roma, vaya.
Besos... sí, anímate, Sicilia entera es preciosa.

Senses
TOTALMENTE de acuerdo... La ciudades, las nuestras, sé bien que las vivimos como escenarios, quizá no tan hermosos, pero siempre atentos y envolventes, de los que no nos podemos desprender cuando sentimos...
Besos

Anónimo
Gracias por su comentario y por completar mis palabras, que espero que, a pesar de no ser yo un purista ni un experto, le hayan interesado a vd. Se debería dejar ver más por aquí, aunque sea anonimamente.

Ángel
Te las enseño todas un día de estos que se ponga todo gris... Lo hago a menudo cuando llueve... me veo las fotos del verano y me animo mucho.
besos... qué te ocurrió que no me dices nada?


Nat
Dónde te vas tú al final (aún no me lo has dicho...)
El mundo está lleno de belleza. A veces ni siqueira hay que ir tan lejos para encontrarla...
besos


Fran
qué bonito poderse emocionar con lo que uno vio y tocó... no??
Besos, y cuídate

Ekiots...
ya sabes que puedo hablar de cosas mucho más vulgares, jejeje
Besos

Cristina-
Pues lo del incendio fue que se incendió un campo y cortaron la carretera... Así que yo, ni corto ni perezoso, me metí detrás de todos los sicilianos que se daban la vuelta y volvían para atrás... cuando se metieron por una carretera clausurada les seguí... pensé que sabrían dónde iban... claro que cuando se pusieron a cruzar un puente ya me entró mas cague... claro, un puente dentro de una carretera clausurada como que no da buena espina... Pero no, al final sólo ocurrió que había un rebaño de cabras en medio de la carretera. Y hasta que el pastor no se las llevó de allí (pasando todos por debajo de un puente estrechito y sin posibilidad -claro- de adelantarlas) hasta pasado un buen rato. Al final, a través de este "atajo" pasamos al otro lado del incendio y seguimos la carretera hasta la incorporación a esa autopista que en realidad no existía (es que esa sólo está diseñada, pero no hecha, me dijo uno en una gasolinera... y es que en siclia uno tiene que tener mucho cuidado con los planos...).Pero aún así, nuestras ganas de llegar a Noto no decrecieron...
A la vista está que no nos equivocamos, no??
besos

Cvalda
qué bien recibir una visita tuya... Sí, Italia es un país grande, y yo un enoamorado de él... si te paseas por aquí lo verás a menudo, jeje.
Un bacio grosso.

Anónimo dijo...

Esculturas de pedra, memórias do tempo. Que pena e que perda para mim, das vezes que estive na Sicilia nunca visitei Noto. Que belas fotos! Recordo o "teatro" grego de Taormina, Catania, Palermo e sobretudo as nuvens que entravam pelo meu quarto adentro em Erice, bem lá no alto com um mar ondulante e de intenso azul inolvidável lá bem no fundo. No teatro da vida em que todos actuamos, não, não és "marionette"... bj

Vulcano Lover dijo...

pe-jota
Sí, un deleite para los sentidos, y también para la reflexión a veces.
besos

Antonello
Então, já tens uma ração para voltar à ilha da trinacria, não é?
No teatro da vida ainda nem sei muito bem se tenho mais duma personagem...
Beijos.

José L. Serrano dijo...

yo fui a Sicilia buscando templos griegos y me encontré con el Barroco que buscaba en Praga cuando buscaba el gótico que encontré en París cuando buscaba el románico que encontré en Toulouse cuando buscaba el arte romano que encontré en Turquía cuando buscaba el arte islámico que encontré en Grecia.

En fin, que Noto me encantó.

(y los helados mezclados con yogur)

siempre que leo este blog me entra hambre